'Samurai Jack' para el cine?
Cuando a principios de la pasada década, Genndy Tartakovski (creador de, entre otras series animadas, la divertidísima e ingeniosa ‘El laboratorio de Dexter’) anunció que iba a llevar a cabo un nuevo proyecto con una acción como nunca se había visto antes en animación para televisión, muchos se preguntaron si sería capaz, y la respuesta, en 2001, fue ‘Samurai Jack’, una serie que se extendió a lo largo de 52 capítulos y 4 años (a razón de 13 por año), que pudo ser vista en EEUU (y en España) a través del canal Cartoon Network, y que, para quien esto firma al menos, es uno de los más bellos trabajos en animación que se han visto nunca en la pequeña pantalla.
Ahora, después de varios años de rumores, de acuerdos que no llegan a nada, y de un proyecto del director (la segunda parte de ‘Cristal oscuro’, que finalmente no va a materializarse), esta joya de serie va a pasar, por fin, de la pequeña a la gran pantalla. Así se anunciaba hace algunas semanas por parte del círculo más cercano a Tartakovski, y parece que la cosa va en serio. Es lo que tiene que se interese por tí un productor del empuje de J. J. Abrams, el cual se confiesa un admirador irredento de la serie, y que está dispuesto a traves de su Bad Robot Pictures y de la Paramount, a ayudar en todo lo posible. Es decir, que la película que culmine el largo viaje de la serie está más cerca que nunca de hacerse realidad.
Una serie única
Esta serie narraba (con la inspiración lejana del ‘Ronin’ de Frank Miller, y algunas fuentes más) la peripecia de un Samurái del que nunca sabremos su verdadero nombre (Jack es un apelativo que unos chavales le encasquetan al conocerle, más que nada porque según ellos le pega…), y que, de niño, es testigo del regreso de un invencible demonio llamado Aku (el protagonista en la sombra de la serie, un psicópata tremendamente divertido), el cual aniquila su hogar y esclaviza a su padre, nada menos que el emperador de Japón. En el episodio piloto (que es doble), una maravilla que envidiaría Kurosawa, el pequeño samurái se pasará años entrenando para vencer a ese demonio con ayuda de una enigmática espada, que es, al parecer, el único objeto que puede inflingir daño a Aku.
Y el caso es que consigue derrotarle, pero en el último segundo, Aku convoca un hechizo y le manda al futuro, a un futuro en el que ya Aku, sin oposición, domina el mundo entero. De esta forma, el Samurái se verá obligado a buscar, durante muchos capítulos, la forma de volver atrás en el tiempo. Su itinerario físico y anímico será una aventura apasionante, intensa y muy a menudo impredecible. Jack, en su calidad de guerrero compasivo, ayudará a mucha gente en su camino, y a veces fracasará también. Pero una y otra vez intentará regresar sin éxito. Hay episodios con muchísima acción, pero también los hay cómicos, otros paródicos, y bastantes de un existencialismo que no está reñido con la aventura más liberadora.
Tartakovski, y su equipo de directores norteamericanos, animadores surcoreanos, y escritores en estado de gracia, co-dirige (al menos) todos los episodios, y se le ha criticado cierta lentitud o parsimonia en su puesta en escena. Pero este ruso, nacido en Moscú y afincado en LA, está muy influenciado por los grandes directores japoneses y rusos, desde Ozu, Kurosawa o el propio Tarkovski, hasta los escritores y poetas de esas nacionalidades, de tal forma que su fuerza expresiva, su bagaje emocional, impregna la aventura sin hacerla tediosa, porque su forma de narrar la acción es frenética. Por otra parte, hace uso de técnicas narrativas muy cinemáticas, y pocas veces vistas en una serie de animación. Humor, acción y espiritualidad en un solo tajo. Una forma de representación, serena y de un ritmo muy especial, que le pertenece a este creador, y sólo a él.
Unos caracteres que se merecían más
De forma bastante misteriosa, ya que nadie dio explicaciones al respecto, y no podía ser debido a un bajón en la audiencia, ‘Samurai Jack’ fue sacada de parrilla en el capítulo 48, precisamente el titulado ‘Jack Vs. Aku’, con lo que muchos creían, erróneamente, que Jack por fin completaría su búsqueda. Pero hay cuatro episodios más, que están incluidos en la colección del DVD, si bien en el último que se hizo, ‘Jack y el bebé’, tampoco el samurái logra volver a casa. Tartakovski esperaba poder retomar a su personaje más querido en una última y definitiva temporada, o bien en una película, pero hasta ahora no ha habido más que palabras.
En alguna parte leí, para horror mío, que habían decidido hacerla en imagen real (como otras series de animación míticas, que deberían haber conocido una traslación animada a la pantalla grande para conservar sus rasgos distintivos), quizá con Russell Crowe (creo recordar que decían) como el samurái. He leído disparates mayores, pero no nos hemos hecho eco de ninguna de estas noticias hasta que tuvieran alguna sensatez. Tartakovski asegura ahora que con la colaboración de Abrams, van a llevar a cabo un largometraje en animación 2D, con algunas partes en 3D, que va a ser el digno colofón a una obra de arte.
Difícil lo tienen, pero esperemos que estén a la altura. En mi opinión, la fuerza de la serie radica en que cada episodio duraba 20 minutos, y en su concisión y rapidez podía contar muchas cosas. Pero podemos dar a este gran cineasta un voto de confianza. Con obras maestras como ‘La infección de Aku’, el díptico ‘El nacimiento del mal’, o ‘Jack y los tres arqueros ciegos’, ha demostrado de lo que es capaz. Ya iremos hablando en blogdecine, según vayan apareciendo, de las noticias respecto a este proyecto.
Vía | Fredatorblogs
Etiquetas: NOTICIAS
Publicar un comentario
<< AL MENU